Grabando I: Entrevista con Pablo «Accidente» (Estudio de grabación Musigrama)

Acostumbrado a locales de ensayo mal acondicionados e instrumentos baratos, mi primer paso por Musigrama (el estudio por donde han pasado Lucky Malice, Rude Pride y Stevie Wonder) me noqueó. Qué desgracia darte cuenta que aunque tus viejas John Smith 412 molen a saco te están destrozando los pies. Vamos, que por no ceder a Decathlon y las bambas caras de colorines ahora tienes una fascitis plantar de cuidado. El punk y lo cutre son lo mejor pero, maldita sea, como suenan esos altavoces y qué bonito todo. En un estudio como Musigrama no hay riesgo de que el disco te quede medio esmirriado. Todo es bueno, casi perfecto y a uno hasta le dan ganas de empezar a tocar flamenco pop o algún otro genero enemigo.

En Musigrama descubrí muchas cosas, algunas de ellas seguramente muy obvias para alguien que no venga de un entorno poblado por talibanes con cresta. La primera es que la música puede ser un trabajo igual de digno como cualquier otro. La segunda es que grabar un disco tiene más de oficio y método que de inspiración divina. Vamos, que si CRASS se hubiesen dejado de tontadas y hubiesen leído un poco mas a Marx y un poco menos de arte algunos habríamos vivido, si no mejor, sí un poco mas lúcidamente. O como mínimo, estas cosas hubiesen penetrado en nuestra mollera antes.

Pablo habita entre dos mundos. Es técnico residente en Musigrama y toca la guitarra en Accidente y la batería en Antídoto. Ha grabado de todo, pero dentro del hardcore y el punk ha hecho los discos de Accidente y Rude Pride, un LP para Lucky Malice, y lo último de Obediencia y Ultra, entre otras cosas.

Pepe Loeches con algunos Take That en Musigrama

Vamos a empezar fuerte. Tú te formaste de mano de uno de los técnicos mas reconocidos en España. ¿Qué significa ser aprendiz de Pepe Loeches, un menda con un palmarés con álbumes tan vendidos y escuchados como El Patio de Triana o casi toda la discografía de Paco de Lucía?

Bueno, yo empecé a ser asistente de Javi Ustara, que se tiró 8 o 9 años aquí. Antes que él y asistiéndole estuvo Álvaro Mata, uno de los mejores técnicos del país en muchos aspectos; y él fue asistente de Pepe Loeches. Este es el orden.

Pepe murió hace unos pocos años pero antes seguía viniendo a grabar cosas muy especiales y que le gustaban mucho y en esos momentos yo hice de asistente suyo y cómo no, aprendí mucho de cada segundo suyo. Era un cachondo mental y siempre digo que aprendí más de sexo que de sonido a su lado.

Esa es una de las cosas más importantes que aprendí de Pepe. Él decía, aunque haya un incendio en la mesa, tú al cliente tienes que transmitirle que todo va bien. Y es verdad

Todo era una pasada con él porque era un maestro en el más estricto sentido de la palabra. Nunca se enfadaba, siempre con buena cara, sabía manejar las situaciones del estudio de manera brutal y eso es muy importante cuando llevas 9 horas metido en un espacio cerrado con mucha gente y con un trabajo que requiere concentración. Esa es una de las cosas más importantes que aprendí de Pepe. Él decía «aunque haya un incendio en la mesa, tú al cliente tienes que transmitirle que todo va bien». Y es verdad.

Por otra parte, verle grabar cosas en directo, grabar música de cámara como con los proyectos de Jesús Villa-Rojo, era otro de sus fuertes. Él era un experto en aprovechar el sonido con la colocación de los micros. Sabía lo que quería para la mezcla y orientaba la grabación en esa dirección desde el principio. Con la colocación de los instrumentos y las salas, los micros, la ecualización, los planos. Cuando se ponía a mezclar estaba casi todo hecho y eso le daba una naturalidad que pocos estudios y técnicos consiguen.

Pepe era muy metódico, tenía un librillo con unos pasos que nunca se saltaba, desde la calibración de la sala y del equipo, los procesos de grabación y mezcla. Y eso le daba mucha confianza tanto a él como a los músicos que venían a grabar. No te hablo de un determinado estilo eh. Pepe ha grabado y mezclado mucho Heavy incluso punk, desde 091, a Burning, pasando por Alarma.

Estas en Musigrama, el estudio de grabación mas longevo del Estado español. Cuéntanos su historia brevemente y qué significa trabajar en un lugar de estas características. ¿Te sientes a lomos de un dinosaurio o pilotando un Royce Rolls? ¿Tiene sentido un estudio como Musigrama a día de hoy?

Pues la historia del estudio es algo que vamos descubriendo poco a poco, porque es muy extensa y divertida. Al parecer, originalmente fue un proyecto entre varios técnicos de RTVE, que cuando acababan su jornada se venían a grabar música. Esto era a principios de los 70.

Posteriormente, Pepe Loeches y Joaquín Cobos compran el estudio, encargan el diseño acústico a la prestigiosa empresa Eastlake, montan la Neve con módulos 1073 y 1064, una mesa única hecha a medida. La analogía con el Rolls Royce es muy acertada, es un equipo hecho cuando el capitalismo competía por fabricar cosas de buena calidad, que no fallasen y que durasen mucho. Tiene un mantenimiento constante y continuado y no tiene las facilidades de recall de otras mesas. A cambio tiene el sonido que se convirtió en el standard del buen sonido en la época dorada de la música pop y rock desde los 70.

En mi opinión, puedes grabar una guitarra en casa quizá, o un bajo por linea, pero para grabar una batería, una sección de cuerda, una big band, una guitarra española o acústica, un piano, una voz con calidad… eso lo tienes que hacer en un buen estudio

Si tiene sentido, lo veremos con el tiempo. Es una empresa abierta desde los años 70 y eso es mucho decir, pero dado el estado de la industria discográfica y la proliferación de home studios y software hace que cada vez sea más difícil.

En mi opinión, puedes grabar una guitarra en casa quizá, o un bajo por linea, pero para grabar una batería, una sección de cuerda, una big band, una guitarra española o acústica, un piano, una voz con calidad… eso lo tienes que hacer en un buen estudio.

El equipo y las salas de Musigrama son algo excepcional. Entre los micros de cinta, la mesa y los racks de reberb y los compresores podríais montar un museo…

Como te decía antes, lo mejor del estudio aparte de la mesa es el diseño acústico de Eastlake. Tenemos una sala brillante que sirve para baterías, percusiones, cuerdas, guitarras, pianos; otra sala grande muerta con pocas reflexiones y muy tratada; y otra pequeñita que da un espacio más para dividir elementos. Esto permite grabar en directo, pero cada elemento está aislado y no compromete al resto. Están divididas con mamparas de cristal que hacen que te puedas estar viendo mientras grabas.

Sobre equipo, la mesa Neve, donde hay 16 previos 1073 y 18 previos 1064. Con una ganancia y una ecualización que es una pasada. Tiene 4 compresores Neve también. Luego tengo 2 UREI LA3A, Un Summit, una Lexicon 480L, Yamaha Rev 7, dos SPX, un U5 de Avalon y un 737, una reverb de muelles AKG, dos Reverbs colgantes de placas EMT. Micros hay 4 Neumann U67, 10 Schoeps CTM55; D12, 414, etc.

Otro de los puntos fuertes es la sala del control, el diseño que hicieron es increible y muchos técnicos grandes que han pasado por aquí dicen que es una de las mejores escuchas que han tenido nunca. Uso este equipo para todas las cosas que grabamos y mezclamos, no se, Concha Buika, Jose María Gallardo, Los chicos del Coro, realmente de todo.

Una vez dicho todo esto vamos a centrarnos mas en ti. Has trabajado con gente que ha estado o esta en la cúspide del negocio musical. Viniendo del punk y el hardcore y teniendo en cuenta el enfoque intrínseco del genero, ¿como llevas relacionarte con productores y músicos con un enfoque de la música en principio completamente ajeno al tuyo?. ¿Aprendes, sufres? ¿Todo a la vez?

Pues casi siempre aprendo, sobretodo si hay buenos músicos y productores. La verdad es que prefiero que la gente tenga claro lo que quiere y te lo sepa expresar, cuando ocurre eso suele ir como la seda y la gente se va encantada. Por raro que pueda sonar, la mayoría de gente que puede considerarse famosa y que tiene un proyecto de calidad -sea cual sea su género musical- es muy respetuosa y simpática. Sueles formar parte del equipo como uno más y a veces te ves pidiéndole cosas de producción artística a gente que es muy grande, se genera una confianza que suele dar muy buenos frutos.

Suelo sufrir más con proyectos amateurs o géneros que no me gustan nada como el techno, donde muchas veces no hay mucho que hacer. Pero vamos suelen ser los menos. Me lo paso bastante bien y hay mucho humor y buen rollo en el estudio.

Me ha gustado mucho trabajar con artistas como Victor Manuel, con Concha Buika, que es una institución y es la tía más cercana y divertida del mundo; con Chuck Loebe que falleció hace un mes y es uno de los guitarristas más alucinantes del mundo. Luego hay proyectos que disfrutas por otras cosas, por retos técnicos, o por que te guste el rollo que hacen, como Anaut, que acaba de mezclar su último disco en Musigrama. Otro ejemplo es El Dorado, un grupo de hard rock que produjo Richard Chyki hace unos años. Este tipo es productor y técnico de Aerosmith y Dream Theater.

Pablo en la sala de control (Foto: Mar Coll)

Que la gente del punk puede ser tremendamente desagradecida es algo que sabemos bien los dos. Grabar un grupo de punk puede ser toda una tortura: el dinero es un tema tabú y la gente se puede estar quejando todo el rato. Los grupos de punk suelen querer que todo suele bien y mal al mismo tiempo sin ni siquiera saber como funcionan sus amplificadores, si es que tienen alguno. Cuéntanos tus experiencias.  

Has explicado MUY bien lo que es grabar con un grupo de punk. Lo peor que puede pasar es que el grupo se crea demasiado listo y encima no tenga las cosas claras sobre su sonido o su producción. La gran mayoría se autoproduce y eso significa que no se producen porque no suelen saber hacerlo. Entonces aparecen los problemas. Algunos confunden al técnico con un productor -que no tiene porqué serlo, o sí, pero no suelen pedirlo-, o se creen que grabar en un estudio es ya sonar de una manera determinada.

Si no tienes las ideas claras de hacia dónde quieres ir, y no sabes comunicarlo, es posible que acabes en un lugar que no querías. Alguna gente del punk comete estos errores y menosprecian la labor de la producción o creen que saben más de lo que saben

En Musigrama grabamos desde big bands de Jazz, pasando por música cubana, clásica, cosas experimentales que fliparías -como llenar el Piano, un Yamaha C3, de pelotas de ping pong-, música antigua, flamenco, soul, pop, rock… Y cada disco tiene una producción y un sonido muy diferente. Si no tienes las ideas claras de hacia dónde quieres ir, y no sabes comunicarlo, es posible que acabes en un lugar que no querías. Alguna gente del punk comete estos errores y menosprecian la labor de la producción o creen que saben más de lo que saben. Comparado con los músicos profesionales, donde hay un respeto por la labor del técnico brutal y saben expresarte sus ideas y caminos pues hay un abismo.

Yo he aprendido mucho lidiando con estas cosas. Ahora siempre intento dejar todo claro al principio, hasta dónde llega mi labor, qué es lo que quieren. Hay grupos de punk que sí se autoproducen muy bien, y aunque no tengan todas las herramientas saben expresarte sus deseos para llegar a un buen resultado. En general, cuanto más aprecian y respetan al técnico mejores resultados tienen. Cuando van de listos sin saber enchufar su ampli suele haber problemitas.

Has hecho mucho flamenco. ¿Con quien has trabajado? ¿Como es grabar flamenco? ¿Es muy diferente que otros estilos?

Pues los flamencos con los que suelo grabar están en su habitat natural. Son verdaderos genios de la música. Desgraciadamente se les aprecia mucho más fuera que aquí. Muchos son gitanos, y desde que nacen maman en casa y en la calle esa música y son grandísimos instrumentistas, lo que llamaríamos freaks, pero de una manera más natural que académica.

El primer tema que mezclé un día que se puso malo el técnico que había antes que yo fue una canción en la que tocaba Diego el Moraíto Chico, cuando ves cómo toca esa gente, el sonidazo y el rollo que le dan a lo que hacen te quedas flipando. Uno de los últimos discos que hemos hecho (de Elena Salguero), tenía en cada canción a un guitarrista importante del flamenco: ahí estaban Rycardo Moreno, José Losada, Josemi Carmona, «el Melón», Jose María Gallardo, Yeray Cortés, Pedro Javier González, Miguel Ángel Cortés, etc.

No se, he trabajado con muchos grandes del flamenco: Estrella Morente, Buika y su banda, Angie y Pepe Bao, Carlos Nieto, Pepe Habichuela, Gerardo Nuñez, Tino di Geraldo, Colina, Bandolero, El Negri, Alicia Gil, María Vargas, Diego Magallanes, Juani de la Isla…Grabar flamenco es igual que todo, si grabas flamenco muy puro seguramente sea sin claqueta, y en directo, a veces sin separar de sala cantaor/cantaora y guitarra, con tomas enteras y pocos o ningún pinchazo. Todo depende mucho del clima, de la relajación en el ambiente, que tengan una buena escucha, que se sientan cómodos. Ahí está lo técnico y también lo psicológico, el productor que dirija hacia dónde tienen que ir los tiros, las tomas, la intención… En cosas más mezcladas pues ya se parece más a una grabación normal, con arreglos, percusiones, claquetas y esos rollos. Pero vamos, también tiene su aquel.

Una anécdota que nos gusta mucho es la de Jose Losada, para muchas de las producciones suele grabar guitarras aquí, y no para de tocar con grupos grandes. Una vez había varios gitanicos jóvenes y Jose estaba contando que había estado de gira por Canadá, Austria, Japón, China… y al oír esto uno de los chavales suelta: «Si al final Jose te vas a recorrer to’ España!», juro que es real.

Lucky Malice durante la grabación de su segundo LP (Foto: Musigrama)

Mucha gente nos hemos interesado en tu trabajo gracias a las grabaciones de los albumes de tu banda, Accidente. ¿Como enfocáis vuestros discos a nivel de sonido, mezcla, etc.? ¿Cuanto crees que ha ayudado el sonido de vuestros discos a la buena acogida que tenéis?

Bueno, Accidente ha supuesto un aprendizaje para mí en cada disco. En el primero acababa de empezar a trabajar aquí y supuso un reto de mezcla importante porque queríamos hacer algo con mucha melodía y muy rápido.

El grupo somos muy fans de grupos europeos con voz femenina como Assassinators, Masshysteri, Day by Day, Apokalipstix, Post Regiment; y algunos americanos como Ballast (Canadá) o Preying Hands, Abe Froman. Venimos de escuchar mucho NOFX, Bad Religion, Good Riddance. Cogí varias cosas del estilo de mezcla del pop, como voz bien presente, instrumentos muy definidos y salió eso. Luego en los demás discos, hemos ido descubriendo cosas que nos flipan, como Observers, Gorilla Angreb, Marked Men, Not on Tour, Youth Avoiders y hemos ido a un sonido un poco más guitarrero y no tan limpio. Siempre hemos grabado los discos en un día y todo en directo, menos las voces, pinchazos y solos, sin claqueta, sin muchos efectos ni producciones muy complicadas.

Creo que en los 80 se grababan discos de punk con muy buena calidad porque no había home studios y a mucha gente eso le gusta

Creo que suena bastante natural y que el sonido ha tenido que ver en la acogida por gente ajena al punk, pero también a gente del punk más mayor. Creo que en los 80 se grababan discos de punk con muy buena calidad porque no había home studios y a mucha gente eso le gusta. Tanto el grupo como yo hemos aprendido a producir, componer, estructurar…y eso se nota en cada disco progresivamente.

Sacas un sonido bastante característico, yo lo percibo claramente tanto en los discos de Accidente como en los de Rude Pride. Sin que se te valla de la manos con explicaciones excesivamente enrevesadas, cuéntanos que procedimientos técnicos utilizas.

Bueno, creo que influye la acústica mucho, te da un sonido muy tratado, no suena a local de ensayo, pero tampoco cristalino. Esto es por los previos y la mesa. Es un sonido muy orgánico y natural. Los dos grupos que mencionas comparten miembros -de hecho yo he tocado con ellos alguna vez de sustituto- y tenemos algunas ideas parecidas. Suelo grabar voces y bajos pasándolo por compresores en postfader a través de grupos de la mesa.

Al mezclar estos discos suelo empezar por la voz porque es lo más importante, la melodía. Luego la dejo en plano con el bajo, que también es muy medioso y definido en los dos casos, con Jazz Bass, luego apago la voz, saco la batería, la pongo en su sitio elemento a elemento, después las guitarras; y luego abro todo y termino los planos y me pongo a automatizar para darle importancia a cada cosa en su momento. Al grabar suelo ecualizar y comprimir para buscar el sonido que quiero en la mezcla y definir los elementos y quitar cosas que no quiero. Alguna reverb, algún delay, y poco más, es bastante simple.

Acabemos volviendo al principio. Loeches trabajó con Joe Strummer en los estudios Kirios para el famoso disco de 091. ¿Te explico alguna anécdota o algo al respecto? He leído cosas muy divertidas sobre esa grabación, a ver si tu nos puedes contar algo.

Pues tengo entendido que la mezcla de Loeches y Strummer no le gustaba a la compañía, no se si era la CBS. Así que una vez que el Strummer se había pirado de Madrid, cogieron a Pepe Loeche y le dijeron que querían la mezcla mucho más aguda. Creo que Strummer después de esto se cabreó bastante, si escuchas el disco tiene unos agudos infumables.

Sinceramente, ¿que opinión te merece BCORE?

Pues no lo conozco mucho. He comprado un disco de Angry Samoans en su tienda de Gracia. Creo que sacan cosas cercanas al indie y al pop punk y se que es un sello mítico que editaba grupos de hardcore de allí hace años. Pero no te puedo decir mucho más, seguro que son muy majos.

Foto de portada: Pablo en la sala de control (Foto: Musigrama)


Dani Frutos lleva unos cuantos años montando conciertos de punk y sacando números del Fanzine Mierda. También ha tocado en algunos grupos como Absurdo o Ultra. Estuvo en la librería Rosa de Foc pero hicieron una reducción de plantilla y tuvo que volver a trabajar en sitios de mierda como Penny Wise/Genco, una fabrica de horchata o en la Fira de Barcelona montando barras y descargando camiones. Le interesa la contracultura y el anarquismo de los 70 pero le asusta que ahora son todos Tabarnícolas o están muertos. No sabe qué más decir.