Harto de todo: GRB pt. II (Juanito)

GRB fueron una gran cabeza pensante. Con un sonido rapidísimo y farragoso por la personalidad de sus dos guitarras fueron capaces de hacer autocrítica y levantar ampollas. Cogieron el punto de mira y lo giraron 180 grados: ya no se trataba de atacar a la policía y al estado, sino de hacerse preguntas a uno mismo. Es muy fácil criticar al prójimo, vamos a hacer auto análisis. GRB fueron la banda que instaló la introspección dentro del punk español.

Raíces

Recuerdo estar escuchando Patti Smith y Jethro Tull y de pronto aparecer el Never Mind the Bollocks de los Sex Pistols. Lo escuchas, te gusta y te pones a pensar en por qué lo están haciendo. Lo entiendes y te preguntas por qué no puedes hacerlo tú. Creo que de ahí nace el espíritu de poder hacer música sin tener que ser un profesional o un dinosaurio del rock. A raíz de esto me pongo la chupa de cuero, los tejanos rotos y empiezo a moverme para formar una banda.

Último Resorte

Al conocer a Silvia se empieza a forjar la idea de formar Último Resorte. Ella también llevaba en mente montar una banda, así que cuando nos conocimos en la plaza Calvo Sotelo [actualmente Plaça de la Generalitat], en una sala de Sant Boi donde ponían heavy y música progresiva, rápidamente me convenció para que yo tocara el bajo. Conocimos a Miguel en unos locales de ensayo de Horta. Veníamos desde Sant Boi para ensayar ahí o a veces lo hacíamos en Sant Vicenç dels Horts, cerca de Sant Boi, con nuestro primer guitarra, Tomy. Tuvimos muchos cambios de formación; pasó gente como el Choli, Jorge, Patrick, Jordi, el Gabardino, etc. Yo le compré mi primer bajo a un tío de Sant Boi por 6.000 pesetas. Con él grabamos nuestras primeras maquetas en el local de ensayo en directo, tocando todos a la vez. Los primeros conciertos los dimos en el Texas, regentado por unas lumis que llevaban la barra y que nos trataban muy bien.

Con Último Resorte tocamos en el Rock Ola de Madrid. Sólo pudimos tocar cuatro temas, porque al dar el primer acorde la gente nos empezó a escupir, en especial a Silvia, que parecía un árbol de navidad. Además la tiraron al suelo y le arrancaron la camiseta. Me puse de los nervios y le tiré el pie de micro a un tío en la cabeza, y a algún otro le aticé con el bajo. Al final acabamos todos en comisaría, sin cobrar y con una demanda por destrozos por parte de la sala

Grabamos nuestro primer single para Flor y Nata con un cuatro pistas, en un estudio que estaba cerca del puente de Vallcarca en Barcelona, y con la pastilla de la guitarra del Strong a tope de graves. Tocamos en el Rock Ola de Madrid. Sólo pudimos tocar cuatro temas, porque al dar el primer acorde la gente nos empezó a escupir, en especial a Silvia, que parecía un árbol de navidad. Además la tiraron al suelo y le arrancaron la camiseta. Me puse de los nervios y le tiré el pie de micro a un tío en la cabeza, y a algún otro le aticé con el bajo. Al final acabamos todos en comisaría, sin cobrar y con una demanda por destrozos por parte de la sala.

Con Último Resorte siempre tuvimos muchos problemas de formación. Hubo cambios continuos de guitarras y baterías, así que nos fuimos distanciando paulatinamente y un día Silvia decidió disolver la banda. Ella achaca esta disolución a problemas personales y de salud debido al abuso continuado de drogas, pero yo creo que había algo más. Nos habíamos llegado a meter muchas anfetaminas, incluso por la vena, pero posteriormente, con GRB, nos drogamos mucho más y con drogas más fuertes, así que no creo que la culpa de la disolución de Último Resorte fuera simplemente el abuso de drogas. Creo que fue un cúmulo de varios factores lo que descolocó a Silvia.

Juanito actuando con Último Resorte en el Magic (Archivo Strong)

Del Punk al Hardcore

Yo creo que el hardcore llega a Barcelona a raíz de la visita de bandas como MDC o Impact. Nosotros teníamos una relación muy cercana con esas bandas. Ángel y yo acompañamos a MDC en su gira española. Fuimos con ellos a Zaragoza y Valladolid, y eso nos marcó bastante. La gran diferencia entre MDC y las bandas que habíamos escuchado hasta el momento era el compromiso, su idea de por qué estaban haciendo esa música, lo que te decían en sus letras y cómo lo explicaban. Te estaban haciendo pensar en lo que hacías y por qué lo hacías. Cuando escuché el primer LP de los Dead Kennedys creía que estaba pasado de revoluciones, que me había equivocado al ponerlo. Y cuando vi que no, que las revoluciones eran las correctas, me quedé muerto y pensé sólo en acelerar.

La gran diferencia entre MDC y las bandas que habíamos escuchado hasta el momento era el compromiso, su idea de por qué estaban haciendo esa música, lo que te decían en sus letras y cómo lo explicaban. Te estaban haciendo pensar en lo que hacías y por qué lo hacías

GRB

Tras la disolución de Último Resorte, Miguel y yo queríamos formar una nueva banda, así que fuimos a buscar a Ángel (Frenopaticss) y le propusimos cantar con nosotros. Después entró Alberto. De hecho, hay dos canciones en la maqueta de GRB que son versiones de Frenopaticss: «No al servicio militar» e «Ineptos». También tocábamos algún tema de Drama del Horror, que era la banda que tuvieron Alberto, Macima y Strong. Empezamos a ensayar en un local en Llucmajor, en Barcelona, con L’Odi Social, cerca del cementerio, y los primeros temas que sacamos fueron «Política estúpida» (recuperado de la última época de Último Resorte) y «Soy». Cuando Alberto se fue a Menorca a la mili llamamos a Strong para que le sustituyera a la guitarra temporalmente, pero cuando volvió decidimos mantener dos guitarras en la banda de forma definitiva. Cuando tocábamos en directo los técnicos se volvían locos, porque al haber dos guitarras creían que una era rítmica y la otra solista, así que iban de culo intentado ordenar ese barullo. Éramos ruido rápido.

Empezamos a ensayar en Nou de la Rambla en el local de al lado de Subterranean Kids y Sentido Común. Era un local muy malo, con mucha humedad. Si dejábamos de ir dos o tres días nos lo encontrábamos todo blanco, lleno de moho. Incluso habíamos encontrado crías de rata. Sentido Común fue la base de Subterranean Kids, ya que el Tinín también estuvo tocando con Sentido Común en la última época. Pero Subterranean Kids era una idea del Boliche, y con eso quiero decir que se hacía lo que decía el Boliche. GRB era una cosa muy distinta: era más una cosa de grupo, las canciones se hacían entre los cinco.

La gran diferencia entre GRB y Último Resorte fue la gente, los que formábamos el grupo, la idea de lo que tenía que ser un grupo. Éramos cinco personas con el mismo desarrollo en sentimientos, en manera de pensar y en manera de ver las cosas; cinco caracteres que juntos funcionaban de puta madre

La gran diferencia entre GRB y Último Resorte fue la gente, los que formábamos el grupo, la idea de lo que tenía que ser un grupo. Éramos cinco personas con el mismo desarrollo en sentimientos, en manera de pensar y en manera de ver las cosas; cinco caracteres que juntos funcionaban de puta madre. Si teníamos concierto al día siguiente, nos íbamos a dormir juntos. Si salíamos de fiesta, salíamos juntos. Había grupo, era una cosa compacta, tan compacta que al final explotó. Nos conocíamos tanto que cuando había roces salían todas las miserias de unos y de otros, y a eso se sumó el accidente que tuvimos con la furgoneta volviendo del País Vasco [Este accidente fue el detonante de la disolución de la banda].

Creo que todas nuestras grabaciones las hicimos en Maratón, en Barcelona. La maqueta la grabamos en seis horas y el single en poco más. Con el LP nos explayamos un poco más, pero tampoco demasiado. Creo que lo hicimos en tres días. Está grabado todo yendo puestos hasta el culo y a saco.

GRB: Strong, Alberto, Ángel, Mike y Juanito (Archivo Strong)

Relaciones

GRB fue un grupo que no tocó demasiado en directo comparado con otras bandas de la escena local, y por eso había un poco de mal rollo y envidias con Subterranean Kids y L’Odi Social. Si tú querías que te pagaran por un bolo lo tenías muy difícil, porque tanto unos como otros se ofrecían para tocar por la cara o en cualquier condición. Nosotros cuidábamos mucho dónde tocábamos, averiguábamos por qué se hacía el evento y para qué causa. Y nos daba la impresión de que el resto de las bandas no lo hacía, cogían lo que les echaran. La sensación que tengo con GRB es que en la mayoría de los conciertos siempre teníamos problemas técnicos, o que algo salía mal. Siempre acabábamos todos de mala hostia. Entrábamos en el local a las cinco de la tarde y salíamos a las diez. Había días que íbamos con la bandejita, y venga… Muchos días nos pulíamos una botella de whisky mientras ensayábamos. No era cada día, pero un día sí y el otro… casi también.

Hubo una época en la que Ángel siempre llevaba un séquito de gente detrás que se parecía a él, tanto hablando como en otros aspectos. Creaba mimetismo, y tengo la sensación de que el Mimo llegó a cantar en Subterranean Kids por eso. Era una rivalidad sana, estábamos puerta con puerta, ellos nos oían ensayar a nosotros y nosotros a ellos. La mala intención la he visto después con el paso de los años, porque el Mimo fue quien nos echó del local y él se siente orgulloso, pero para mí eso son miserias y envidias. Es verdad que a nosotros nos costaba más pagar el local, pero tampoco es para estar orgulloso. Entre Ángel y Gos había algún roce, porque L’Odi Social era más un grupo de barra de bar, panfletario, y nosotros, visto con el paso del tiempo, creo que éramos un grupo más intelectual.

Juanito con GRB (Archivo Strong)

Drogas

En esa época las drogas que mandaban eran las anfetaminas. Mucha farmacia, morfina sintética, pentacocaínas, osegon, etc. La gente en general iba bastante a saco, los punks y los quinquis de barrio estaban muy mezclados, y las drogas estaban muy presentes. El caballo nunca me atrajo. Hay drogas que te gustan y drogas que no te gustan. Con las drogas siempre he intentado sacarle horas al tiempo, no me interesa perderlo estando dormido.

En esa época la gente tenía suficiente información, posiblemente no tanta a la hora de iniciarse en las drogas como existe hoy en día, pero cuando tomabas una droga sabías lo que te podía pasar. La gente se enganchó al caballo porque le gustaba el rollo que le daba. Esa típica frase que dicen los mayores, “tomas una droga y después tomas otra, después pruebas otra, después otra, etc.”, es verdad. Si te gusta experimentar, experimentas. Más tarde, con los viajes y giras a Europa, en concreto a Holanda, empezaron a entrar drogas nuevas como el speed, etc., pero en realidad el alcohol es la droga que ha hecho más daño a largo plazo. Puede que las bajas del caballo sean muy escandalosas, pero el alcohol ha destrozado a mucha gente. Las muertes con el caballo no fueron todas por sobredosis. Hubo embolias cerebrales y una enfermedad que aún casi ni se conocía: el SIDA.

Fotografía de portada: Juanito luciendo cresta en su étapa como bajista de Último Resorte (Archivo Strong)

Extraído de Harto de todo: Historia oral del punk en la ciudad de Barcelona 1979-1987 de VV. AA. (BCore, 2011)


Al habla Juan Ramón Ferrando, nacido en 1960 en el barrio de Las Delicias de Zaragoza – Cornellà – Casa Blanca (Sant Boi) – Barcelona