Harto de todo: Subterranean Kids pt. IV (Marc)

Subterranean Kids fueron nuestros Minor Threat. Fueron la banda que mejor captó el sonido de lo que se estaba haciendo en América a principios de los ’80. Técnicos y matemáticos en sus ejecuciones. Rápidos y rabiosos. Un destilado de todo lo que nos llegaba desde los Estados Unidos, pero con una personalidad propia que con la perspectiva del tiempo aún se ha visto más acusada.

Raíces

Tocaba en una banda que se llamaba Rock Fumeta. Entonces apareció el primer single de los Sex Pistols. Estábamos en el ‘77. Más tarde una colega que fue a Londres me trajo el primer disco de los Clash y empezamos a hacer versiones de esas bandas y a tocar en algún local como el Texas. Después de Rock Fumeta también estuve tocando en Attak con el Dimony, el Manel y el Panko. No duró ni un año. Fue en el ‘81. Tocábamos en el Garaje de L’Hospitalet, donde se movían gente como Decibelios y Resorte. Attak fue un disparate de mucha anfeta, Dexedrina pura.

Cuando esto se acabó empezamos con Shit S.A.,que duraron un par de años. Éramos Wells, Manel y Carles Masabeu (Boski). En los últimos meses de vida de la banda entró el Bolo a tocar la batería y el Manel pasó a la guitarra. Hicimos algún concierto con esta formación, como el concierto de plaza Catalunya con Decibelios.

Yo había ido a un par de bolos de Subterranean Kids y me gustaba bastante el rollo que hacían. Tinín, su bajista, tuvo que irse a la mili, así que me preguntaron si quería entrar en la banda, pero temporalmente, solo hasta que el Tinín volviera de la mili. Cuando la acabó se quedó a vivir en no sé qué pueblo, así que me quedé fijo y estuve tocando con ellos hasta la última gira, en el ‘90.

Marc Garcia actuando con Attak (Foto: Arturo Xalabarder)

Con el Bolo nos conocíamos de mil bandas y de haber venido a vernos ensayar con Attak. Era un chavalito. Al Mimo lo conocía por su hermana. Al principo era eso, el hermano de Maribel. Y al Pep ya lo conocí con Subterranean Kids. No lo conocía previamente, solamente lo había visto tocar con Sentido Común. Cuando yo entré en la banda la maqueta estaba grabada, así que estuve ensayando una buena temporada en el local de Nou de la Rambla. Creo que los primeros conciertos fueron para la plataforma PUAJ en el Ateneu de Nou Barris con un montón de bandas. Recuerdo que Alberto de GRB tocó algunos temas con ellos, porque les estuvo ayudando con el bajo en el impasse del Tinín antes de que empezara yo a tocar.

Nuestro primer disco lo produjo la Pá a nivel económico. Los temas los sacábamos de muchas maneras. Una de las que más usábamos era pedir números a los amigos que nos estaban viendo ensayar. Jugábamos con los números y los trastes. Así sacábamos los primeros riffs. El primer disco lo grabamos en Maratón bastante rápido porque no teníamos mucha pasta. Creo que lo hicimos en cinco o seis dias.

Drogas

Era una época que era pura anfeta, anfetas de farmacia, Dexedrinas con recetas falsificadas. Hasta que llegó el speed, que venía de Ámsterdam. El caballo lo conocí bien porque entró a saco en Barcelona en el ‘78 o así y muchos de los colegas se engancharon. Algunos ya no están aquí. Pero el punk fue un poco posterior a la entrada del caballo. Había gente que seguía tonteando con el caballo, pero mayoritariamente la gente se tiró más a las anfetas. Anfeta pura, velocidad…

Relaciones

Teníamos mucha relación con GRB porque eran nuestros vecinos de local y siempre había piques entre los cantantes. Yo siempre me mantuve al margen. Sé que el Mimo y el Ángel tenían sus tonterías, pero también había mucha mezcla con el tema de las anfetas, que distorsionaban las cosas. En general había muy buena relación. Con L’Odi nos llevabamos bien. Nos encontrábamos en los mismos bares y estábamos de fiesta juntos. Puede que con Anti/Dogmatikss no tuviéramos tanta relación, pero nos veíamos constantemente con el Sisa y el Joni, que estaban más por Barcelona.

Con Subterranean Kids los rebotes eran por diferencias de caracteres. Además una gira son 24 horas de convivencia y a veces se hace insoportable.
El Pep era un tío muy tranquilo y hacía un poco de moderador en la banda, pero él no venía a las giras, así que se empezaron a acentuar las diferencias

Las relaciones internas con Subterranean Kids se fueron deteriorando. Yo personalmente con el Mimo y el Bolo chocaba bastante porque se subían mucho a la parra y muchas veces iban demasiado de estrellitas. Si les metía la bronca por alguna cuestión de la banda, los tíos se molestaban porque se creían los amos y señores del grupo. Hubo una discusión muy acalorada en la última gira que fue la gota que colmó el vaso y finalmente decidí dejar la banda. Yo ya no los aguantaba y posiblemente ellos tampoco me soportaban a mí, así que dejé la banda cuando aún quedaban algunos conciertos para terminar la gira europea. Volví unas semanas antes de que acabara la gira. Cuando volvieron ellos aún me llamaron por si quería seguir tocando y les dije que no, que para mí hasta ahí había
durado Subterranean Kids. Los rebotes eran por diferencias de caracteres. Además una gira son 24 horas de convivencia y a veces se hace insoportable.
El Pep era un tío muy tranquilo y hacía un poco de moderador en la banda, pero él no venía a las giras, así que se empezaron a acentuar las diferencias. En esa gira vino Xavi Manresa de conductor y también acabé discutiendo con él. Me sentí culpable, porque lo acababa de conocer en un bar y se vino de chofer e iba a lo suyo. Lo que hizo fue pillar contactos y después acabó montando Cap Cap. El tío lo tenía muy claro, mentalidad de empresario. La verdad es que la cosa no acabó demasiado bien con él tampoco.

1984, Shit S.A. durante una actuación en Zeleste. Wells, Marc, Boliche y Boski (Foto: Arturo Xalabarder)

Del punk al hardcore

Con los Shit S.A. ya practicábamos un punk muy acelerado, pero conocí el hardcore cuando empecé a tocar con Subterranean Kids. Me inundaron con cosas nuevas como Bad Brains, Black Flag, Septic Death, etcétera. Hasta entonces no había tenido contacto con ese tipo de música. También teníamos relación con los MDC porque sacaron el LP recopilatorio Peace and War, que llevaba un tema de los Shit S.A. y otro de Kangrena, y cuando vinieron a tocar a Barcelona se instalaron en casa de los Kangrena en Masnou. En Rock Fumeta uno de los cantantes era el Quoque, que luego acabó cantando en Kangrena. Los Kangrena se pillaron duro con el jaco. Además creo que son los que a nivel estético tuvieron más impacto. A mí el rollo estético siempre me la ha traído muy floja. Nunca he intentado llevar una estética que fuera en la línea de la música que escuchaba. Yo en esa época me lo pasé muy bien. Bad Brains fue una banda que me flipó desde el principio por esa mezcla de caña y reggae.

El hecho de girar con Subterranean Kids por toda Europa fue una flipada y un concierto que recuerdo especialmente fue en Ámsterdam con Fugazi y NOFX. Fugazi en directo me impresionó bastante. En el fondo el cómputo total fue positivo: conoces gente, viajas… Los conflictos venían porque se tomaban decisiones sin contar contigo. No había espíritu de banda. Los portavoces y los líderes decidían todas las cosas y eso me molestaba. Gente con mucho ego sumado a que estando de gira yo privaba, me soltaba y no me cortaba un pelo, y así nos fue…

Fotografía de portada: Marc en su su etapa con Subterranean Kids (Foto: Pep Rasta)

Extraído de Harto de todo: Historia oral del punk en la ciudad de Barcelona 1979-1987 de VV. AA. (BCore, 2011)


Al habla Marc Garcia. Nacido en 1960. Barrio de Gràcia (Barcelona)