Entrevista a Arcwelder

Esta es la segunda vez que entrevisto a Arcwelder. Y no es sólo porque me quedaran preguntas no formuladas en la recámara (que luego me he dado cuenta de que sí) sino por otra razón mucho más excitante que os contaré luego. He sido fan de Arcwelder desde que los escuché por primera vez. Bueno, igual tardé unas semanas en volverme fan, pero luego fui fan-fan. De los de comprarse todos los discos. Y sacaron su sexto disco Everest en 1999. Y el tiempo pasó. Y luego, ya, silencio. Pero el año pasado el sello de Chicago Touch and Go Records, su discográfica de –casi– toda la vida, celebró el 25 aniversario e hizo un concierto de reunión con todas sus bandas estrella en el que (por supuesto) tocaron Arcwelder y al que (por supuesto 2) no pudimos acudir.

Pero los tíos majos de T&G colgaron unos clips en su web y allí vimos que Arcwelder seguían en plena forma. Igual Scott MacDonald, el batería-cantante había perdido un poco de pelo (más bien todo) y los hermanos Graber tenían un poco más de patas de gallo pero… ¡como le atizaban! Lo primero que pensé viendo los extractos de su actuación y de la consiguiente entrevista fue que que buenos que seguían siendo y que siempre me había imaginado su directo así. Que alguien debía traerlos a esta península y que merecían salir a ver mundo, conocer a la gente y que la gente los conociera a ellos.

Como no soy muy amigo de los festivales de masas y no tengo dinero para traer a tres tíos de gira desde Minneapolis, sólo se me ocurrió proponérselo a los alegres muchachos de Atzavara para que intentaran meterlos en el renacido Festival de Sant Feliu. Les pareció bien y a Arcwelder ¡también! Así que para que los que no los conozcáis, lo hagáis, y para que los que sí lo hacéis, veáis que siguen vivitos y coleando, aquí está esta entrevista.

Aun no hay cartel definitivo todavía (N. del Editor: Evidentemente, ahora ya sí), pero si no pasa nada Arcwelder tocarán en el Festival de Sant Feliu este verano. Espero que os guste la entrevista y que vengáis a verlos, la ocasión vale la pena.

En la filmación de la actuación de Arcwelder en el 25 aniversario de Touch&Go Records, lo que vemos es a tres tíos pasándoselo teta. Lo que nos viene a los fans primero a la mente es ¿cómo es posible que sólo hayáis tocado en ese show, el benefit para Callum Robbins y hayáis contribuido con una canción en un CD? ¿Estáis realmente en un parón de vuestra carrera o tenéis planes para seguir tocando y grabando en un futuro?

Rob: La verdad es que hemos tocado en unos cuantos shows más de los que dices, pero tampoco muchos. Igual 4 o 5 veces al año. Creo que parte de la razón de que lo pasemos tan bien tocando es que tampoco lo hacemos muy a menudo. Nuestros planes son seguir como ahora, tenemos unas cuantas canciones que estamos tratando de grabar, pero que aún no hemos acabado.

Scott: La disminución en la actividad de Arcwelder es tan sólo una progresión natural. Desde mi perspectiva, he estado tocando en bandas underground desde que tenía 16 años (N. del A.: De eso hace más de 20 años, amigos). Ya no tengo la necesidad de subir a un escenario y decir “miradme, miradme” y ya no estoy tan interesado en actuar en público como antes. Aún quedamos una vez por semana, más o menos, para ensayar pero se podría decir que ya no somos una “entidad pública”. No sé si suena deprimente, pero ciertamente no para nosotros. Aún somos una banda y aún nos gusta tocar juntos.

Es que viendo a Arcwelder en tan buena forma en esa actuación fue cuando se me ocurrió que se os podía traer al Festival de Sant Feliu. El chico que contactó directamente con vosotros me dijo que os interesó la idea desde el primer momento. Considerando que dijisteis que sí casi inmediatamente a tocar en un festival independiente de la otra punta del planeta, se me hace muy extraño ver que no toquéis muy a menudo…

Rob: ¡Quizás es que la perspectiva de viajar gratis a Catalunya sea mejor oferta que la mayoría de las que tenemos! Hemos decidido no tocar más a menudo porque estamos en un punto de nuestras vidas y carreras en los que hay cosas más importantes que este grupo.

Scott: Es que la gente no nos ofrece muy a menudo llevarnos a España, ¡por no decir nunca! Así que, lo hicimos. ¿Qué pasa, qué ya tienes remordimientos por habernos llamado?

Volviendo a la grabación de esa actuación: hay un momento en la entrevista en la que se os ve abrumados por el hecho de formar parte de la plantilla de Touch & Go. Literalmente decís algo como “[…]el hecho de que se nos asocie de alguna manera con el resto de estas bandas es increíble […] No somos una gran banda, sólo somos fans de la música”. Pero, al mismo tiempo, los que os conocemos sabemos que hay grandes seguidores vuestros en grupos tan míticos como Shellac, Jawbox, etc. los cuales han expresado repetidas veces su admiración por Arcwelder (de hecho yo los conocí por un top-ten de Jay Robbins). ¿Qué opináis de todo esto?

Rob: La verdad es que hemos tenido la suerte de conocer a gente estupenda que nos ha apoyado mucho durante todos estos años. Aparte de las bandas que nombras, también lo ha hecho mucha gente de Minneapolis.

Scott: Siempre hemos sido bastante modestos, pero que eso no se confunda con falta de confianza en nuestra música. Nos encanta lo que hacemos, o no estaríamos haciéndolo todavía más de 20 años después. Lo que pasa es que no damos por asumido que a otros pueda gustarles tanto. Cuando empezamos, tocar este estilo de música era ir totalmente contracorriente y de ninguna manera una opción para llegar a ser conocidos. Así que pienso que aún conservamos algo de esa sensación. Es increíble cuando bandas como Jawbox o Shellac expresan su admiración por lo que hacemos. Nosotros también les queremos.

A lo que me refería exactamente en la anterior pregunta es que, por ejemplo, Todd Trainer, el batería de Shellac, define a Arcwelder como “el único grupo en la historia de la música grabada que nunca ha grabado una mala canción. NUNCA”. Imagino que sois unos tíos modestos pero… ¿cómo os tomáis una declaración como esta?

Rob: Creo que Todd miente. No, en serio, ya te digo que me siempre me sorprende que a gente como Todd, Bob Weston o Corey (Rusk, el tío de Touch and Go Records) le guste tanto nuestra música. Ser populares nunca ha sido un objetivo prioritario para el grupo, simplemente hacemos música que nos gusta. El hecho de que le guste a otra gente, cuyas opiniones respeto muchísimo, es increíble.

Scott: Estamos agradecidos de que Todd sea tan fan nuestro. ¡Estoy en gran parte de acuerdo con él!

Supongo que seguís sin tener contrato en Touch & Go (nadie lo tiene) pero, ¿cuál es vuestra relación con Corey Rusk y el sello en este momento, con tantas bandas populares en plantilla? ¿Os gusta alguna de ellas? ¿Qué pensáis de todo el hype que rodea a bandas como !!! o CocoRosie? ¿Qué grupos son vuestros favoritos de toda la historia de Touch & Go?

Rob: Aún tenemos una muy buena relación con Corey. No se si volverá a haber otro disco de Arcwelder en T&G en un futuro, pero tampoco creo que sea algo que se pueda descartar del todo. En lo que respecta a mis bandas favoritas de T&G, es muy difícil escoger. Muchas de ellas son amigas nuestras. Aunque, sin duda alguna, la mejor de ellas para ver en directo son The Jesus Lizard. Posiblemente sean la mejor banda en directo de la historia. También he visto a Shellac unas 30 veces y siempre han estado estupendos. En lo que respecta a CocoRosie o !!! tengo que reconocer que no estoy muy familiarizado con lo que hacen pero no tengo ningún problema con que sean tan populares. La música es un campo muy grande y hay muchas maneras posibles de disfrutarlo.

Esta es la segunda vez que os entrevisto (la primera fue en el año 2001, en el o fanzine Miroslav Mecir, ahora Follón). En esa entrevista alababais a bandas como Gang of Four, Wire o Joy Division y desde entonces hemos presenciado un revival de esas bandas y de lo que conocemos como post-punk. ¿Qué pensáis de los revivals en general? ¿Cuál pensáis que puede ser el próximo ara que ya se nos están acabando todos los que eran posibles? ¿Quizás un revival del maldito Yodeling?

Scott: La no wave aún no ha sido muy explotada. Bandas ruidosas con saxo, como los Contortions o Blurt. Quizás sea ése.
El primer disco de los Ramones salió en 1976. De eso hace 32 años y ese disco aun suena contemporáneo. 32 años antes de 1976 era 1944, el Rock and Roll ni existía (¡y Hitler sí!– N. Del A), era el gran momento de las bandas de Swing. Imagínate vivir ese cambio. De los Ramones a la música que se escucha hoy no hay un gran cambio, es bastante triste. Yo era demasiado joven para darme cuenta del cambio, pero ir de “Please please me” a “Purple Haze” en tan sólo 5 años es alucinante.

Rob: Sí. Probablemente es el momento de que el grunge haga un retorno. Siempre será nuevo para alguien.

Yo hago reseñas para fanzines y muchas de las que hago últimamente, de grupos que me pasan promos y que yo no compraría, son de grupos muy producidos y complejos, con múltiples instrumentos y capas y capas de sonido y estúpidas canciones llenas de sintetizadores y overdubs que no me dicen nada. Muchas de ellas me recuerdan a los sonidos más horribles y casposos de los 80. ¿Crees que ese será el nuevo hype? Creeis que volveremos a esos días de “Lío en Rio” o “Este muerto está muy vivo” (gran película esta última)? ¿Qué pasó con los grupos de guitarra-bajo-batería?

Rob: No lo sé. Las guitarras ya llevan mucho tiempo como el instrumento principal en la música popular. En algún momento de los años 50 reemplazaron a las big bands y parece ser que así ha seguido hasta hoy. Quizás el ordenador las esté reemplazando finalmente, pero no lo creo.

Recuerdo leer una entrevista con Corey Rusk para el malogrado Punk Planet en el que hablaba del underground y de cómo el mainstream lo había asimilado. Literalmente decía: “lo malo [de que las cosas se hagan más populares y lleguen a más gente] es ver como lo que haces se ve desustanciado (y añadiría despojado de su contexto o propósito, N. Del A.) de maneras en que a ti no te gustan”. Imagino que nunca habéis sido una banda muy famosa, pero ¿que pensaríais de este fenómeno aplicado a vuestra música?

Rob: La “contracultura” se define por lo que no es, no es “como el rollo popular”. Esto, al final, es una idea que se autodestruye porque, si te haces popular o famoso, pierdes toda tu identidad, te conviertes en lo establecido y alguien se rebelará contra ti. Quiero decir que entiendo que se use la palabra “underground” como etiqueta para describir un tipo concreto de música, pero es una filosofía complicada en la que basar el concepto que tienes de tu grupo. Creo que es más consistente definirte por la música que te gusta tocar y dejar que esta hable por sí misma, sea popular o no.

En un aspecto más positivo, creo que la tecnología ha mejorado notablemente la posibilidad de que la música llegue a ser escuchada sin tener que ser popular. Antes de los 80 era muy caro grabar y distribuir música, así que mucha de la música que se escuchaba era el muy publicitado y promovido “mainstream”. En los últimos 20 años esto ha cambiado enormemente. ¡Ahora es posible que un Festival de música de Catalunya conozca a una oscura banda de la otra punta del mundo!

Scott: La música a la que hoy se le llama punk no me interesa mucho. Está demasiado pulida. La gente que hacía punk-rock en los 70 eran marginados e inadaptados que no eran muy buenos con sus instrumentos. Los discos era andrajosos. Actualmente la gente que hace “punk” son tíos guapos que podrían tocar como Rush si quisieran. Ya no le veo ninguna emoción. Echo en falta ese rollo desaliñado.

Mi gusto musical no ha cambiado mucho durante los años, me sigue gustando más o menos lo mismo de siempre, aunque voy conociendo cosas nuevas y hay grupos en concreto o ciertos estilos que ya no escucho casi nunca. Por otra parte hay cosas con las que disfruto igual hoy que la primera vez que las escuché. Arwelder entran en esta última categoría. De hecho, si hoy en día hubiera de meterme en un grupo de rock (cosa que dudo porque tengo casi 35 tacos y no sé ni tocar la flauta) me gustaría que fuera algo como Arcwelder, con coros y buenas melodías, energía y actitud punk y sonidos raros o experimentales que transitaran por debajo del muro de sonido. ¿No crees que esta combinación de elementos puede ser la que haga que alguna música sea tan excitante y atemporal?

Rob: Definitivamente, lo que define el gusto musical de alguien es una compleja combinación de experiencias personales. El goce musical es casi enteramente subjetivo, es el efecto que tiene en ti lo que lo hace excitante o aburrido. Para algunos, Frank Sinatra o Neil Diamond tiene el mismo efecto que Joy Division o Wire tienen para mí.

También me doy cuenta de que hay muy poca música que no pueda apreciar. Si la escucho muy atentamente o lo suficiente casi siempre le encuentro algo disfrutable.

Muchas de los grupos de música underground hoy en día parecen estar formados por veinte e incluso treintañeros. Cuando el punk explotó en el 76-77, las bandas estaban compuestas casi exclusivamente por adolescentes de 16 o 17 años. ¿Por qué crees que ha cambiado esto?

Rob: Es una pregunta interesante. No lo sé. ¿Quizás esté relacionado por como ha cambiado el rollo contracultural?

¿Por qué creéis que (como decís en vuestra página web) corrió el rumor por Europa de que Rob y Bill trabajaban para la NASA? ¿Es que sois una especie de Pynchons del punk-rock?

Rob: Hace muchos años alguien nos describió como “rocket scientists” (científicos aeroespaciales), que en argot de EEUU se usa para referirse a los “engineering geeks” (friquis de la ingeniería). Supongo que esta expresión no se conoce en Europa.

Y ahora la última pregunta y la más chorra de todas. No es un rumor sino una tontería que siempre me ha intrigado. Rob y Bill sois gemelos o simplemente hermanos (se parecen un huevo, N. del A.)?

Rob: Sólo hermanos. Uno de nosotros es 4 años y medio más viejo. A ver si adivinas cual.

Fotografía de portada: Pete Conway

Extraído de AbsolutZine  en julio de 2008.


Uri Amat (Barcelona, 1973)

ull_URILleva pisando estos campos del Señor desde hace más de 40 años. Su larga «militancia» en el underground empieza en su pre-adolescencia, cuando empieza a editar fanzines con su hermano mayor bajo los nombres más estrafalarios: Rowed Out!, Hangover y La Escuela Moderna son algunos de ellos. También ha estado implicado en otras publicaciones en las que, incomprensiblemente, le han dejado colaborar: la revista de tendencias AB, el fanzine Absolut de BCore y su posterior encarnación digital o el blog Gent Normal, entre otros. Nunca le han pagado ni un céntimo por ninguno de sus artículos o entrevistas. Pero como decimos en catalán: «ací caic, allà m’alço».

Actualmente se dedica, cuando sus retoños se lo permiten, a ir a trabajar en bicicleta, visitar bibliotecas y beber en bares de viejos. Éstas (bicis, bares y bibliotecas) son las tres «B» básicas de la ciudad utópica fourierista en la que ingenuamente cree vivir hoy en día, mientras a su alrededor todo se derrumba.